La Vía Láctea sobre el Atlas marroquí
Llevábamos varias horas en la furgoneta cuando la vimos apareced en el horizonte. Parecía una delirante fortaleza de arena y era mucho más majestuosa de lo que me había imaginado. Una antigua kasbah abandonada en la cima de una montaña, como tenue retazo de un sueño en las mil y una noches (pero Alah es más sabio, más prudente más poderoso y más benéfico)…